Ante todo debemos conocer las características y personalidad del autor Tirso de Molina, un hombre de fe, religioso y de gran talento para la rima.
Escritor de varias y determinadas comedias, donde se funden la ironía, la religión y la condición humana.
Con corolarios que maravillan por el mensaje ético y moral que acrecienta la lucha por la conquista de las virtudes del alma. 
Acuñó el término Don Juanesco, o Don Juan, para el motivo que el avezado lector ya conoce. 
Humanas Ediciones ofrece varias de sus comedias religiosas, donde la filosofía y la psicología (en ese momento no oficializada) se entreveran con el mismo entrevero -valga la redundancia- de los personajes.
Creador de dichos personajes con una pluma ágil, ritmica y prosaica, casi inigualable.